viernes, 26 de febrero de 2010
De como una pardilla pierde un avión ...
Jueves. 12.30. Me despido de mi familia. Besos, abrazos, cuídate, etc... Mi padre me lleva al aeropuerto. Me despido de él, más besos y abrazos, nos vemos pronto, y me dirijo a la terminal. Ya tengo sacadas las tarjetas de embarque con esa compañía bandera (será pirata, sin duda) pero tengo que facturar el baúl de la Piqué así que me coloco en la cola de facturación y decido sacar ya el DNI para tenerlo todo listo. No encuentro el DNI. Busco y rebusco dentro de mi bolso. Nada. Un sudor frío me recorre todo el cuerpo mientras mascullo en voz baja "mierda, mierda" una y otra vez. Momento de pánico. Vuelvo a escarbar en el bolso, abro la maleta, busco entre la ropa mientras asoma un fuet de Casa Tarradellas y las galletas Quely, mientras el de detrás me mira con cara compasiva. Saco todas las tarjetas de la cartera con la esperanza de que se haya quedado pegada con otra. Ni rastro del maldito DNI. Ahora sí me está entrando un ataquito. Me llega el turno y le cuento a la azafata el problemón (con toda la cara de pena que puedo dar). Pone cara de fastidio y me pregunta si tengo el carnet de conducir. Doy un largo suspiro de alivio(que debe oir hasta el de la aduana) pensando en lo inteligente que he sido al no olvidármelo esta vez y me doy simbólicas palmaditas en la espalda mientras saco el carnet del bolso. Salvada, pienso. Obviamente la suerte no podía estar de mi lado, claro está. Teclea algo en la pantalla y me dice: "Pero usted va hasta Amsterdam. En ese caso no podemos dejarle volar" Y seguidamente me dice que para el extranjero necesito un documento de identidad y el que carnet de conducir es, como yo tengo que comprender, para conducir. Con esa lógica aplastante (debe ser que hasta Madrid va el piloto conduciendo) suelta un "Siguiente". Y yo me quedo con mi cara de poker a un lado de la cola sin saber qué hacer. Me voy a servicio al cliente y me dicen que lo sienten mucho pero que no pueden hacer nada, que sin DNI no vuelo. Y punto. Y no sirve una denuncia de la policía. Necesito un documento original. Llamo a mi hermana, a mi padre y al tuli en estado de histeria. Me dicen que me tranquilice y piense dónde he podido perder el DNI. Visualizo todos mis movimientos de los últimos días y se me enciende una luz. El Corte Inglés. Mi padre me recoge de nuevo en el aeropuerto y me deja en los Grandes Almacenes. Allí la Srta. Puri(no es coña) me dice que sí, que está en objetos perdidos. Recojo el preciado documento y vuelvo a Ca'n Shrek, cabreada conmigo misma...qué pardilla que soy!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Bueno, estas cosas son un fastidio, pero seguro que a tu familia les pareció estupendo tenerte unas horas más con ellos.
Al final la salvación te la dio la Puri!!
la verdad Diablo es que mi familia ya está acostumbrada a estas Nuriadas...
Y tienes toda la razón, la Puri fue mi heroína, qué viva la Puri! :))
Publicar un comentario