viernes, 31 de diciembre de 2010

Feliz a-go-ta-dí-si-mo fín de año

Sí, ya sé, ya sé... llevo desaparecida una eternidad y mi hermana ya se ha encargado de regañarme por tener el blog en estado pelotilla del oeste... pero qué tres semanas! Fue llegar del bucólico molino san-nicolero y un no parar, oye. Que si corrige exámenes, que si haz cajas para la mudanza, que si limpia el apartamento de Amsterdam y la mansión de los Trap de Enkhuizen...que si múdate, que si sigue limpiando, que si la calefacción no funciona, que si llama al técnico, qué agotador.... y menos mal que nos fuimos a Mallorca a pasar las fiestas, me he pasado dos semanas durmiendo como la del dibujo y comiendo. Esos han sido mis dos quehaceres diarios, ni internet, ni facebook, ni blog ni na de ná. Sólo dormir (mucho) comer (mucho más) y estar con la familia y amigos, ah! y achuchar y reachuchar a mis sobris,  y... he dicho comer? Joer, si es que vuelvo con 3 kilos de más... Por supuesto, ese tiempo es el que pasa volando y ya estamos de vuelta para celebrar el fin de año en nuestro flanderiano pueblo de Enkhuizen. Que por cierto, ya han empezado con los petarditos a primera hora de la mañana y es que en Holanda es costumbre y tradición celebrar el último día del año con fuegos artificiales mientras se comen un oliebol, que viene a ser un buñuelo con pasas, qué raros son estos tulipanos. Yo, por supuesto, he comprado uvas en el super (no tengo ese problema de "se han agotado señora") porque gracias a Dios y al de internet ayer nos pusieron la tele con el canal internacional. Y es que un fin de año sin uvas es muy soso, ya me tocó el año pasado brindar con mis suegros y que queréis que os diga... un chin-chin de pacotilla, que te deja así, ni fú ni fá. Con las uvas hay emoción, atragantamientos, competición, trampas...Aquí vamos a comer las uvas aunque me tenga que tragar a la Igartiburu (es que sólo tenemos TVE).

Y nada, que ya estamos en Enkhuizen, viviendo en el más absoluto caos. No creo que termine de abrir cajas y de colocar cosas en un mes. Además, para más inri, aún no ha llegado la lavadora y hace una hora la nevera decidió pasar a mejor vida. Menos mal que podemos dejar la comida a la intemperie, que con este frío se conserva que da gusto. Pondría fotos pero:
1. Me da verguenza que veais la casa en estado de Diógenes.
2. Se me ha roto la cámara (se me escurrió de las manos, qué novedad...el tuli está que trina) Pero no os preocupéis Lorena e Isaormaza (que sé que tenéis muchas ganas de verla) que pronto me haré con una cámara y osvais a aburrir de ver fotos! Por cierto Isabel, enhorabuena por tu blog :)

Lo dicho, a partir de ahora actualizo más a menudo, os deseo a todos un feliz año nuevo. Que el 2011 os traiga sólo lo mejor!!!

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Nieve

Queda oficialmente inaugurada la temporada de nieve en Tuliland. El sábado amaneció nevado, qué alegría, qué alboroto.... y que puñetero frío. En realidad la estampa es de lo más bucólico, eso no lo vamos a negar: la ciudad cubierta de un manto blanco, los canales congelados, los muñecos de nieve... pero claro, también existe la otra cara: los movimientos gráciles del que va embutido cual chorizo ibérico en todo tipo de ropa, incluído gorro orejero, manoplas y bufanda de 2m enrrollada en tu cara,  los malabarismos para no caerse de la bici cuando el carril está congelado (como dice mi padre, tendré que ponerle unos esquíes a la bici), ese moquillo que se te queda en estalactica con el gélido viento que siempre viene de cara, las manos pegadas al manillar porque otra vez se te han olvidado los guantes en casa... en fín, esas pequeñeces que te llevan a imaginarte en una playa del Caribe con un daiquiri en la mano.
Y con esta estampa tan navideña nos espera un fin de semana con menos once grados a la espera de los regalitos de San Nicolás. Mis suegros han alquilado un molino cerca de Nijmegen para celebrar Sinterklaas toda la familia juntita rollo Flanders, pero rollo Flanders de verdad... que anteayer me enteré de que nos van a dar un programa y todo y además hay unas horas estipuladas para desayunos, comidas y cenas... por Dios, que fin de semana mas largo me espera...
Y el siguiente finde NOS MUDAMOS. Por fín están a punto de terminar las obras en la mansión Tuli. Y menos mal, porque nos esta costando un ojo de la cara el que los polacos se estén quedando en nuestra casa, entre otras cosas porque ponen la calefacción al tope. El otro día llegamos y aquello parecía una sauna. Yo creo que hasta duermen con la calefacción encendida, los muy puñeteros... Me esperan días de limpieza, empaquetar y desempaquetar :)