lunes, 10 de octubre de 2011

En el tren

En los trenes tulipanos hay varias cosas que me ponen los pelos como escarpias:

1.Que se me siente al lado la típica señora (no sé por qué pero siempre son señoras) que se piensa que todo el espacio es suyo. Comienza el despliegue de bolso, bolsas de la compra y abrigo-chaquetón de tres tallas más. Si encima esa señora está resfriada y cada dos minutos carraspea, tose y hace ruidillos guturales...la verdad, prefiero ir de pie y a 2 km de distancia. Pero como el tren va a tope acabo acurrucada lo más posible a la ventana y me subo el cuello del jersey hasta las napias para evitar que sus gérmenes entren en mi organismo. Pero aún hay más. La señora en cuestión piensa que puede aprovechar el trayecto hasta Amsterdam poniendo al día su agenda y llamando hasta a su tía abuela con la que hace dos lustros que no se comunica. Y todos en el tren somos partícipes de sus - pensará ella- entretenidas y amenas conversaciones acerca de que va a hacer su amiga Puri esta noche para cenar o de si se ha enfadado con su santo (no me cabe duda) esposo porque ayer se le olvidó echar la basura... Por mí a ese tipo de especie se le debería prohibir la entrada en el tren.

2. Que la gente se piense que el tren es el lugar idóneo para una sesión completa de belleza. No hay día que no me tope con una mujer (¿por qué siempre somos nosotras?) que se saque el espejito, el mega bolso y los brochones. Ojo, si solo fuera eso yo ya estaría contenta...pero no, las hay que se llevan hasta el kit de depilación y sin ningun tipo de pudor empiezan con la extracción peluna del entrecejo y el bigotillo, pelo por aquí pelo por allá...una vez hasta incluso una sacó unas tijeritas y se cortó las uñas de los pies... como si fuera de lo mas normal. Vamos, que será lo próximo, ¿las bandas depilatorias para hacerse las ingles?

Pero la noticia del día es la solución que han ofrecido los de los ferrocarriles holandeses ante las quejas de los usuarios por la falta de baños en algunos trenes. Me refiero a los sprinters, que son los trenes de corta distancia. Ahora los políticos han dicho que es obligatorio que todos los trenes dispongan de baños. Aquí la brillante solución:


Ni más ni menos que una bolsita para mear...amos a ver... ¿a qué mente brillante se ha ocurrido tan espectacular idea? Porque ya me diréis quién es el bonito/a que se mete en la cabina del revisor (vacía para tal menester) y hace su pipí ahí dentro... y no, no  voy a entrar en la discusión de quién atina mejor. Ver para creer.

viernes, 7 de octubre de 2011

Escuela en marcha!

Ya tenemos escuela de español en el pueblo! Hace dos semanas inauguramos mi nuevo proyecto: Enkasa. El nombre le va que ni pintado pues Enkhuizen se compone de Enk (que ni idea de lo que significa, creo que nada) y huizen (que significa casas en holandés). Después de la poca promoción que hicimos, pues todo fue a última hora y con el tiempo al límite, aún estoy sorprendida de tener nada más y nada menos que 17 alumnos! y todos dispuestísimos a aprender, que es lo que me gusta. Estoy un poco cansada de dar clase a adolescentes que lo único que quieren es aprobar un exámen y punto. Llegar a clase y ver sus caras de hastío...le produce a una de todo menos motivación. Así que con los adultos estoy encantada...por fín hay gente que me escucha cuando estoy explicando!!! Los lunes y jueves doy clases en mi escuela y los miércoles y viernes en Amsterdam así que estoy bien liada... pero feliz e ilusionada con este nuevo proyecto. El tuli y yo nos hemos pasado meses trabajando duro en el local para que nos quedara algo bonito. Aquí van las fotos, espero que os gusten :))

Aquí el logo de la academia:
La entrada:


La sala de esparcimiento, jeje, koffie en thee:


La clase:


El baño:

 ¿Qué os parece? ¿Me auguráis futuro?