
Esta noche voy a dejar de lado el ya tedioso temita eslavo y voy a hacer una incursión en el intrínseco y mágico mundo de los pelos y de cómo combatir esa lacra que afecta a la mujer latina...Mañana me voy a Mallorca y he tenido que llamar a mi hermana para que me pida hora para depilarme con carácter de urgencia y es que... desde que vivo en la planície aún no he podido encontrar una sóla tienda donde vendan cera, increíble pero cierto (eso pensaran todas las que como yo han nacido con esa desgracia de ser morena y del sur de Europa). Por no haber no hay ni crema, el anuncio ese de Veet de la playa y la montaña no lo conocen aquí, no... He oido que en algunos sitios turcos sí te depilan pero la verdad, no me inspiran demasiada confianza así que yo me traje la epilady ... esa que dice el anuncio que hace magia y tus pelos desaparecen y te quedan unas piernas suaves de cine...MENTIRA!!! Al principio me la pasaba, ahora con este tiempo de m***** y los polacos en casa pues una se ha dejado crecer las lianas, suena horrible...lo sé. Yo sufro en silencio. Lo más gracioso es que una vez mi suegra me preguntó que si me quería. apuntar a algún deporte en Holanda. Lo primero que pensé es "qué clase de pregunta es esa" y la segunda reflexión fue "No basta con la bici todo el día para arriba y para abajo?". Parece ser que no. Así que me hice un poco la chulita y le dije que yo había practicado el basket el España. Lo que no le dije fue que de eso hacía unos 15 años lo menos. Y luego le dije que también me gustaba nadar pero claro me daba un poco de pereza por lo del tema depilación. Mi suegra atónita me dice: "Que tontería, tu vas a nadar no a tomar el sol, la gente ni te va a mirar"... A mi me salió del alma y le dije: "Es que nosotras en España tenemos pelos, negros, largos y feos" y me imaginé a mi misma nadando, enredándome en mis pelos y ahogándome...menuda visión. Pero sí me di cuenta de que al fin y al cabo todo es una cuestión de mentalidad, a ellos no les importa mucho lo que piensen los demás y no le dan tanta importancia a ese tipo de cosas, eso y...que la naturaleza les ha otorgado la gracia de ser lampiñas...que si no otro gallo cantaría.